Las empresas de gimnasios que tienen éxito se basan en una visión a largo plazo en torno a objetivos estratégicos y una visión a corto plazo en torno a una planificación práctica.
Para dirigir un negocio de gimnasios en auge, debe considerar la posibilidad de emplear un pensamiento estratégico diferente al del statu quo.
En lugar de basar su estrategia únicamente en el trabajo que realiza su empresa y en cómo puede hacer este trabajo mejor, puede ser el momento de dar un paso atrás y redescubrir su propósito, pensando en por qué hace lo que hace.
"Como seres humanos, a veces tendemos a estancarnos en lo que queremos y en cómo conseguirlo, en lugar de explorar por qué lo queremos en primer lugar", dice Bill McBride, presidente y director general de Active Wellness y BMC3 en San Francisco, California. "Nosotros abogamos por el coaching para que los clientes/afiliados consigan la máxima eficacia en sus programas de estilo de vida, pero a veces las empresas necesitan buscar un coaching similar o simplemente volver a articular su 'pasión y su porqué'".
Si tiene problemas para crear una estrategia empresarial ganadora, deténgase a considerar su "por qué" y empiece a pensar menos como una empresa y más como un ser humano.
"Este componente de naturaleza humana se traslada también a las empresas", dice McBride. "Las empresas son entidades legales formadas por personas. Suelen tener los mismos retos que los individuos: estrés financiero, amistades y relaciones, rupturas, dramas emocionales, ganancias inesperadas, contratiempos, etc."
Y esto es solo la punta del iceberg del pensamiento estratégico. McBride cubrirá aún más en su sesión "Winning in Business Requires Strategy" el miércoles 21 de marzo en IHRSA 2018 en San Diego, CA.
Entonces, ¿cómo recuperar su "por qué"? McBride recomienda que las empresas y los empleados sigan estos tres consejos para definir mejor por qué hacen lo que hacen:
"Y recuerde", dice McBride, "deben ser cosas que nadie más pueda decir en su mercado... si cualquiera pudiera reclamarlo, no es especial para su organización".
"Este componente de naturaleza humana se traslada a las empresas... Suelen tener los mismos retos que los individuos: estrés financiero, amistades y relaciones, rupturas, dramas emocionales, ganancias inesperadas, contratiempos, etc."
Bill McBride, Presidente y Director General
Active Wellness & BMC3, San Francisco, CA
Definir su "por qué" crea conciencia en torno a lo que le gustaría lograr como parte de su estrategia comercial principal. Una vez hecho esto, puedes atender las necesidades insatisfechas del mercado.
El siguiente paso consiste en encontrar la manera de hacer que el pensamiento estratégico forme parte de su cultura empresarial diaria, y está bien si esto lleva algún tiempo. Es importante tener en cuenta que debe tener una visión a largo plazo en torno a los objetivos estratégicos de su empresa y una visión a corto plazo cuando se trate de una planificación más práctica.
"Soy un firme creyente de que hay que aprender a decir no a las buenas ideas para poder ejecutar las buenas/grandes ideas actuales".
Bill McBride, Presidente y Director General
Active Wellness & BMC3, San Francisco, CA
McBride cree que la mejor manera de empezar a pensar estratégicamente es reservar momentos específicos para hablar de estrategia.
"Muchas veces estamos en modo 'bombero' y nunca llegamos al modo de pensamiento estratégico en nuestra reunión de operaciones", dice. "Fijar el tiempo de pensamiento estratégico durante las reuniones de operaciones tiende a acortar el tiempo de lluvia de ideas, por lo que considero que lo mejor es hacer reuniones estratégicas por separado".
Asegúrese de que su equipo se mantiene centrado en la consecución de resultados vinculando la estrategia organizativa al plan operativo que utiliza.
También es crucial tener en cuenta que está más que bien decir "no" a las ideas estratégicas, aunque sean buenas.
"Soy un firme creyente de que hay que aprender a decir no a las buenas ideas para poder ejecutar las buenas/grandes ideas actuales", dice McBride. "Decir que no es el mayor componente para el éxito de las organizaciones (y de los individuos)".
En un sector en constante evolución, como el del fitness, puede ser un reto averiguar qué estrategias empresariales darán el mayor éxito y determinar qué tendencias merece la pena seguir.
Cuando se le pregunta sobre cómo seguir las tendencias en desarrollo que influyen en las estrategias empresariales y el pensamiento estratégico, McBride sugiere escuchar al consumidor.
"¿Cómo podemos conocer mejor los deseos y necesidades del consumidor?", se pregunta McBride. "Creo que las empresas de análisis de datos tienen un gran potencial para servir a nuestro sector. Creo que es más grande que la actividad física: es el estilo de vida y los patrones de compra al por menor relacionados."
El uso de la tecnología para captar el análisis del comportamiento del consumidor será transformador para el sector de los gimnasios, afirma. Ayudará a las empresas a determinar el uso de los equipos en el club, a aclarar los porcentajes de retención y a descubrir cómo los gimnasios pueden crear estrategias más adaptadas que satisfagan las necesidades de los consumidores y se basen en los objetivos generales de nuestras empresas y de nuestro sector".
Shannon Vogler es una ávida consumidora de fitness que utiliza su capacidad creativa para elaborar hermosos contenidos para empresas de salud y bienestar. Ofrece una variedad de servicios de marketing digital cuyo objetivo es promover la importancia de un cuerpo y una mente activos. Cuando no está trabajando, Shannon disfruta levantando pesas, corriendo y animando a los New England Patriots.
