Durante muchos años, el término "recorrido del cliente" se ha utilizado para referirse al camino o las interacciones que un consumidor tiene con su marca, producto y/o servicios. El consumidor puede ser una referencia, un cliente o miembro actual, alguien que potencialmente está buscando sus servicios, o incluso el personal interno que gestiona su negocio.
El viaje en sí abarca todos los puntos de contacto -tanto online como offline- entre un consumidor y una marca, producto o servicio. Incluye no sólo los puntos de interacción directa entre los clientes y las empresas -anuncios, anuncios, sitios web, etc.- sino también los puntos de contacto indirectos en los que se obtiene la opinión de terceros sobre una marca, producto o servicio -portales de reseñas, foros de usuarios, blogs, etc.
Por lo general, el modelo de recorrido del cliente incluye etapas como la concienciación o el descubrimiento, cuando alguien descubre sus productos o servicios, y la conversión, cuando los clientes potenciales se han convertido en clientes reales, habiendo comprado sus productos o servicios.
Un viaje diferente
En el sector de los gimnasios, el recorrido del cliente es específico para su propio y único público, de ahí el término "recorrido del socio". Aunque parte de la terminología y los pasos del viaje son similares, la logística y los caminos difieren a la hora de crear una experiencia global.
Nick Thornton, vicepresidente de ventas de Club Automation, describe el viaje del socio a través de lo que él llama "La experiencia".
Dice lo siguiente:
Atraer a los clientes potenciales
Aumentar las conversiones
Activar a los miembros
Personalizar las experiencias
Automatizar la administración