En la actualidad, más de seis millones de estadounidenses padecen la enfermedad de Alzheimer, y se prevé que esta cifra alcance los 13 millones en 2050. Y, según la Asociación de Alzheimer, la pandemia de COVID-19 aumentó las muertes por Alzheimer y demencia en un 16%. Una nueva y esperanzadora investigación muestra que aumentar los niveles de aptitud física, incluso en cantidades mínimas, puede reducir en gran medida el riesgo de que una persona desarrolle Alzheimer.
Una mayor aptitud física reduce sustancialmente el riesgo de Alzheimer
Un estudio de nueve años llevado a cabo por la Academia Americana de Neurología ha descubierto que cuanto mayor es la forma física de una persona, menos probabilidades tiene de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. El estudio siguió a más de 650.000 veteranos estadounidenses y descubrió que el grupo más en forma tenía un 33% menos de probabilidades de desarrollar Alzheimer que el grupo de participantes menos en forma. "La idea de que se puede reducir el riesgo de padecer Alzheimer simplemente aumentando la actividad es muy prometedora, sobre todo porque no existen tratamientos adecuados para prevenir o detener la progresión de la enfermedad", afirma el autor del estudio, el doctor Edward Zamrini, del Centro Médico de Veteranos de Washington y miembro de la Academia Americana de Neurología. Según ScienceDailylos resultados del estudio se presentarán en la 74ª Reunión Anual de la Academia Americana de Neurología, que se celebrará en Seattle, WA, del 2 al 7 de abril, y prácticamente del 24 al 26 de abril.