Todos sabemos que centrarse en los clientes es importante, pero adoptar una cultura totalmente centrada en el cliente es un diferenciador competitivo y un camino probado hacia mejores ingresos. Según Deloitte, las empresas centradas en el cliente son un 60 % más rentables que las que no lo están.
La idea de una cultura centrada en el cliente no es nueva. Se remonta a 1954, cuando el famoso consultor empresarial y autor Peter Drucker afirmó: "Es el cliente quien determina lo que es una empresa, lo que produce y si prosperará."
Hoy en día, una cultura centrada en el cliente engloba un conjunto de creencias, estrategias y valores diseñados para situar al cliente como punto central del éxito de la organización. Se centra en crear experiencias coherentes y altamente positivas para el cliente.
Claves para una cultura centrada en el cliente
Para el equipo de Xplor Mariana Tek, una empresa líder en soluciones de software para gimnasios, establecer la norma cultural comienza con la contratación.
"Nuestro objetivo es traer a bordo a miembros del equipo empáticos, apasionados e, idealmente, conocedores del sector, que no sólo estén entusiasmados con lo que estamos construyendo para ayudar a resolver los problemas de nuestros clientes, sino también para resolver los problemas de los propios consumidores de las marcas de nuestros clientes", señala Mollie Navarro, vicepresidenta de éxito de clientes.
Esto significa centrarse en adaptar el producto para resolver los problemas de los clientes.