Los ves entrar en tu club todos los días. Son los socios que van a la misma máquina de cardio y hacen siempre el mismo entrenamiento, avanzando sobre la cinta de correr con todo el entusiasmo de los extras de "The Walking Dead".
Los científicos especializados en ejercicio físico saben que quienes realizan exactamente la misma sesión de cardio irán obteniendo poco a poco menos beneficios del entrenamiento. La culpa la tiene la adaptabilidad del cuerpo humano, que exige una variedad de estímulos físicos para progresar de forma constante. Este hecho fisiológico, y el puro aburrimiento de los entrenamientos cardiovasculares de estado constante (incluso teniendo en cuenta las opciones de entretenimiento personal), ha impulsado a la industria a ofrecer más opciones de programación de fitness, incluyendo el campamento de entrenamiento, las clases de ciclismo y el fitness de baile. No sólo los resultados son mejores, sino también la propia experiencia del ejercicio. Estos entrenamientos son muy energéticos y divertidos.
El reto para los operadores de los clubes es llevar ese mismo nivel de entusiasmo y entrenamiento orientado a los resultados a su sala de cardio. Las máquinas de cardio siguen siendo el equipo más utilizado por los socios de los gimnasios, según Informe sobre el equipamiento de los gimnasios de la IHRSA: Tendencias de gasto, utilización y programación. Sin embargo, la forma en que los socios utilizan esos equipos marca la diferencia en cuanto a la satisfacción que perciben con su experiencia general en el club.