1. Ofrecer unas instalaciones limpias y seguras
La principal preocupación de un médico u otro profesional sanitario es la seguridad y el bienestar de sus pacientes. Buscarán remitirse a un club que esté limpio, sea seguro, no sea intimidante y cuente con personal experto dispuesto a ayudar a sus pacientes a tener éxito.
2. Utilizar los conocimientos de los miembros actuales
¿Tiene socios que son médicos, dietistas o fisioterapeutas? Forma un comité y obtén su opinión sobre cómo mejorar los servicios y programas del club para satisfacer las necesidades de los pacientes, y cómo comercializar con otros profesionales de la salud.
3. Resolver problemas con programas
Muchas personas desaconsejadas (o nuevas en el mundo del fitness) se sienten intimidadas por los clubes o han probado a hacer ejercicio (quizás incluso en un club antes) sin éxito. Estos socios se beneficiarán enormemente de los programas específicos diseñados para proporcionar orientación educativa y servicios para atender sus necesidades específicas.
4. Haz que se trate del programa, no de la venta
Los clubes de la IHRSA con programas de bienestar médico exitosos envían a los médicos referidos a un representante de su programa de bienestar médico -como un entrenador o coordinador del programa- y no al departamento de ventas. Los participantes en el programa de bienestar médico pueden desconfiar de la presión que se ejerce sobre ellos para que se afilien, por lo que una venta más suave suele funcionar mejor a largo plazo.
5. Seguir el progreso de los miembros
Esto permite a los participantes ver su propio progreso e informar a su médico de lo bien que les va en su club. Consulte el Creación de programas de bienestar en su club de salud libro electrónico -gratuito para los miembros de IHRSA- para obtener consejos sobre el seguimiento del progreso y plantillas útiles.